inextricable: intrincado; difícil de desenmarañar.
pasé muchos años buscando una palabra que describiera el trabajo que hacía y quería hacer. pero mi quehacer nunca estaba abarcado dentro de las palabras que escogía en el momento, fuera «fotografía», «transformación de conflictos», o «arte relacional», por nombrar algunos ejemplos.
pensé que encontrar una palabra haría más fácil el «profesar», encontrar trabajo, crear mi propia profesión, encontrar «clientes». pero mientras más intentaba, más me eludía, y constantemente me encontraba con palabras que describían un gran aspecto del camino que quería andar, como lo hizo «tejeduría social», sin embargo, no parecía tener espacio para otros aspectos, como poesía profundamente personal. me encontré performando una práctica, en vez de practicándola.
un día decidí hacer un mapeo «conceptual» de todos los proyectos que he hecho, textos que he escrito, temas que he investigado, prácticas que he querido implementar, servicios que he querido ofrecer, cosas que he querido hacer. fue una tarea difícil por las interconexiones y superpociones entre temas y categorías, técnicas y metodologías, intereses de investigación, aproximamientos, etc.
parte de la dificultad dentro de mi búsqueda era tratar de encontrar una palabra que describiera una práctica. pero me di cuenta que el mapa conceptual me estaba dando la palabra que necesitaba; una palabra que describía las (inter)conexiones entre mis múltiples prácticas y aproximaciones emergió: inextricable. esta palabra se refiere en su totalidad al enredo de lo que hago, y también es una referencia hacia el mundo y los contextos en donde lo hago.
el arte inextricable es tanto una práctica como una forma de entender el mundo que reconoce el enredo de todo, así como la necesidad de desenredos específicos que son, en ellos mismos, recordatorios de inextricabilidad.
fue en 2012 cuando me encontré con la frase de Anaïs Nin, citada en la página de inicio de este sitio web: «toda my creación es un esfuerzo de tejer una red de conexión con el mundo. siempre la estoy tejiendo porque alguna vez fue reventada». por ocho años, la frase que sirvió como mi brújula consistentemente me apuntó hacia la red de conexión reventada, la cual interpreté como aquella de mis contextos humanos inmediatos. en 2020, Yuderkys Espinosa Miñoso hizo una invitación durante un webinar, la cual me llevó a mayor profundidad de esta brújula: «…les invito, les convido, que no importa desde dónde nos estemos moviendo… tenemos que estar muy conscientes de que lo que tenemos que trabajar es por restituir ese lazo [comunal] primigenio en peligro y prácticamente destruido por la modernidad».